Actualizada el domingo 6/JUL/14 (Tercera entrega)

¿Dónde evangelizar?

En el lugar de trabajo.

Gran parte del día lo pasamos en nuestro trabajo, ¡y qué mejor que el lugar donde trabajamos rebose del amor de Dios y del prójimo! Para lograrlo deberemos evangelizar nuestros lugares de trabajo, con la palabra, pero mucho más con el ejemplo, porque si hablamos mucho de Dios y de los santos, pero no somos buenos compañeros, ni respetamos a nuestros jefes, entonces señal es de que no podemos evangelizar, porque sería como escandalizar a los que no saben de Dios, pues como ha dicho alguien alguna vez: Quizás nuestra vida sea la única Biblia que lean algunos.

Y aquí es donde se ve el respeto humano, si en realidad estamos dispuestos a perder el favor de los jefes, con tal de agradar a Cristo. O si preferimos agradar a los patrones, pero desagradamos al Señor.

Ya Jesús nos ha dicho en su Evangelio que quien no lo reconoce ante los hombres, Él tampoco lo reconocerá ante su Padre cuando venga en su gloria. Y es una promesa pero en cierta forma también una amenaza, porque debemos elegir y ser audaces, valientes, ya que al Señor no le gustan los miedosos.

Dios proveerá. Y si por algún motivo debemos ponernos en contra de una decisión de nuestros jefes o compañeros de trabajo, y por ello perdemos estima y hasta el puesto, no desfallezcamos, porque Dios no deja sin premio a quien  valientemente da la cara por Él y por el Bien y la Verdad. Dios sabrá proveer a quien se esfuerza por llevar luz a su ambiente de trabajo.