Actualizada el sábado 10/AGO/13 (Segunda entrega)

¿Por qué evangelizar?

Porque muchos están tristes.

El demonio ha logrado traer la tristeza al mundo, puesto que él hace caer en pecado, y luego del pecado viene la tristeza. Pero aunque muchos no caigan en pecado, igual sienten la tristeza de vivir, por tantos males que hay en la humanidad.

Es por eso que ha llegado el momento de evangelizar. “Evangelio” significa “Buena noticia”. La buena noticia de que Jesús resucitó y está vivo en medio de nosotros, realmente presente junto a nosotros, en todo momento, dispuesto a que recostemos nuestra cabeza cansada sobre su pecho glorioso, y así disfrutemos del gozo que brota de su Corazón Misericordioso.

Ya lo ha dicho el Señor en el Evangelio, que quien vaya a Él, nunca más tendrá ni hambre ni sed, puesto que quedará saciado. Y eso es lo que sucede cuando las almas conocen el Evangelio, bien predicado, y entendido como lo explica y enseña la Iglesia Católica y no cualquiera.

El Evangelio trae esperanza a las vidas de los hombres y quien tiene esperanza ya no puede estar del todo triste, puesto que espera algo mejor, algo bueno que sucederá a su debido tiempo, y ya es feliz desde ahora.

Llevemos el Evangelio a todas partes, comenzando por quienes tenemos más cerca, e incluso aunque parezca que ellos ya conocen las cosas de Dios, a veces damos por descontado que “saben” cosas, pero nos asombramos cuando les hablamos de algunas verdades de la fe que creíamos ya sabían, y nos damos cuenta de que son ignorantes de ellas.

No es mucho el tiempo que tenemos a nuestra disposición para anunciar el Evangelio a todo el mundo. Ojalá lo sepamos aprovechar, y oigamos la invitación que nos han hecho los últimos Papas, especialmente el Papa Francisco, a llevar la alegría del Evangelio a todas las gentes.